Durante décadas, las empresas de mayor éxito prosperaron en la innovación de productos como la estrategia natural para aumentar los ingresos, la cuota de mercado, y la fidelidad.
Las innovaciones de productos de hoy en día, y el crecimiento que crean, a menudo son incrementales y fugaces. Veamos como ejemplos los televisores o PC, donde cada competidor replica rápidamente las últimas características, la velocidad, el brillo. Como resultado, las empresas están descubriendo que los rendimientos de los esfuerzos de productos son más difíciles de contar.
En el índice Innovación Global 1000, el gasto en I + D aumentó un 5,8% el año pasado, sin embargo, los ingresos de esas empresas aumentó menos del 1%.
La competencia global y la difusión tecnológica significa que los competidores capturan rápidamente la mayoría de las mejoras, mientras que la transparencia de los medios digitales y sociales también incita a los consumidores a cambiar rápidamente la fidelidad con cada nueva oferta seductora.
Los líderes de mercado de hoy están logrando el éxito por la implicación de los clientes en toda la experiencia de conformación, la innovación, la marca, y su medición. Están dominando una nueva disciplina que nos referimos como «experiencia de la innovación” o “user experience” por ir más allá del producto o servicio propuesto para reimaginar la experiencia del cliente al utilizar nuestro producto.
El resultado arroja nuevos, inesperados, momentos que deleitan a los clientes y crear oportunidades significativas para un nuevo crecimiento.