Desayunos en línea sobre ‘Grandes temas de la economía y el comercio internacional’
La actual situación puede impulsar la investigación en nuestra industria alimentaria
Vigo, 30 de marzo de 2022.- Las exportaciones gallegas de productos alimentarios se van a resentir por la crisis de Ucrania, “pero menos que si nuestras empresas estuvieran orientados a mercados menos desarrollados”. El hecho de que se trate de productos de alto valor añadido (aunque algunos, como la conserva, se verán afectados por el coste de la materia prima) junto con la concentración de nuestras exportaciones en la UE (75 %) hacen prever que nuestras ventas internacionales no se verán excesivamente afectadas.
Así lo aseguró Miguel Ángel Otero, director del Máster en dirección y gestión de comercio exterior de la Universidad de Santiago, durante el desayuno en línea del Círculo que mensualmente analiza los grandes temas de la economía y comercio internacionales, ‘Desde Ginebra’, y que en esta ocasión se centró en ‘El futuro de la alimentación’. Este desayuno, organizado conjuntamente con Abanca, contó con la participación de Javier Sierra y Sergio Prieto, consejeros de Agricultura y de Asuntos Comerciales de España ante Naciones Unidas y Organismos Internacionales, respectivamente, quienes en la primera parte hablaron sobre el contexto global; y con Miguel Ángel Otero, Juan Manuel Cividanes, cofundador y socio director de ‘theFoodTechLab’, y Pablo Cabanelas, coordinador del Máster de comercio internacional de la Universidad de Vigo, en una mesa centrada en Galicia y moderada por Alejandra Fernández Nogueira, responsable de comercio exterior sur de Galicia en Abanca.
El conflicto entre Ucrania y Rusia alerta, sin embargo, sobre las debilidades de la cadena de valor de nuestra industria. Desde las deficiencias en el suministro de energía (por la dependencia exterior), la gestión del transporte (“el ferrocarril de mercancías es un reto pendiente”, apuntó Javier Sierra) y la lejanía de algunos proveedores (“hay que analizar la situación para evitar lo del coronavirus: la cercanía del proveedor nos garantiza un mínimo”, señaló Pablo Cabanelas).
Para la UE, no obstante, la suficiencia alimentaria siempre ha sido prioritaria. Sin microchips podemos vivir mejor o peor. Sin alimentos, no”, apostilló Sierra. “Los sistemas alimentarios son críticos, sensibles para los gobiernos”.
A nivel mundial, hay grandes retos, en especial el demográfico. “La ciencia tiene respuestas y va a transformar modelos clásicos y creará otros, basados en proteínas, insectos, algas”, dijo Sierra. “La sensibilidad manda; hay que buscar sistemas menos lesivos con el medioambiente”, señaló Cividanes. “La proteína marina como alternativa a la carne. En Galicia, empresas privadas y centros de investigación llevan muchos años investigando en ese tipo de oportunidades. Hay que luchar con todos los retos, con la sostenibilidad como reto principal”. Una idea con la que también coincidió Cabanelas: “Hay ejemplos muy interesantes de valorización en productos de la pesca”.
Riesgos internacionales
El conflicto ha obligado a revisar a la baja las previsiones de crecimiento internacional, debido a que, aunque Rusia y Ucrania representan el 2 % del PIB, son claves en materias primas alimentarias, metales y energía.
Javier Sierra relató que el incremento de los precios del trigo afecta especialmente a África (“para algunos países es una auténtica tragedia”), se han elevado los costes de fertilizantes y energía- Alemania depende en un 30 % de los fertilizantes de Rusia. Además, si bien se atisban posibilidades, lo cierto es que Europa “ha puesto cortapisas a avances en productos alimenticios, como es el caso de los transgénicos, cuando el resto del mundo puede utilizarlos. Debería haber una reflexión en la gobernanza europea: si mantenemos cortapisas, encontraremos restricciones.
Si bien es cierto que en las economías desarrolladas la gente no dejará de comer por el incremento de precio del pan o la leche, esta elevación de costes sí puede ser un foco de inestabilidad política en otros países, especialmente en África.
